Antes de finalizar el año se recibirán 8 millones de dosis de Sputnik V, que ya pagó. Sin embargo, falta por ingresar el 26.4 por ingresa.
Ocho meses han trascurrido desde que las autoridades del Ministerio de Salud anunciaron la firma de un contrato con el Fondo de Inversión Ruso para adquirir la vacuna Sputnik V, para inmunizar a los guatemaltecos contra el covid-19.
El Estado pagó Q614.5 millones para adquirir 16 millones de dosis, pero el convenio ha sido polémico desde el comienzo. Rodeado de secretismo por supuestos términos de confidencialidad que argumentó la exministra de Salud Amelia Flores, hasta la fecha se desconoce el contenido del documento firmado entre Guatemala y los rusos.
A la luz salió de que la compra de la vacuna se hizo a través de un intermediario, lo que alimentó las dudas sobre la negociación. Esto llevó al Ejecutivo a publicar un comunicado en julio pasado en el que señalaba que el contrato se celebró con el Fondo de Inversión Directo de Rusia (RDIF, en inglés) y el pago se hizo a la compañía Limited Liability Company Human Vaccine.
Flores estaba en el ojo del huracán por las irregularidades que rodeaban la adquisición, que también era defendida por el presidente Alejandro Giammattei.
Tras varias fechas aplazadas, entre mayo y junio llegaron los primeros lotes del fármaco ruso, 150 mil dosis en total, pero solo del primer vector, pues a diferencia de las otras vacunas contra el covid-19, la Sptunik V usa dos componentes distintos para completar el esquema de vacunación y alcanzar la eficacia del 97.6 por ciento que promete.
Desde entonces, la recepción ha sido parcial y a cuentagotas, y sin el compromiso de Human Vaccine de dar un calendario de entrega de las dosis. Guatemala ha estado en desventaja desde el comienzo de la negociación, según expertos en el tema.
La Contraloría General de Cuentas comenzó una investigación acerca de la compra de vacunas Sputnik V en mayo, al momento no hay avances significativos.
Ante el incumplimiento de la entrega de dosis, en julio Salud anunció que Rusia planteó la posibilidad de la devolución del dinero pagado. Sin embargo, no ocurrió y Flores renegoció el contrato y se acordó que serían 8 millones de dosis las que Guatemala recibiría por los Q614.5 ya pagados.
Una verdad a medias, pues, según el diputado Orlando Blanco, presidente de la Comisión de Seguridad Social del Congreso, si al país llegan los 8 millones de dosis antes de este 31 de diciembre, estará obligado a comprar por los siguientes dos años los otros 8 millones de dosis para completar la negociación inicial.
Con el nuevo cargamento que llegó este domingo 26 de diciembre ha ingresado a Guatemala un total de 5 millones 917 mil 500 dosis, entre primero y segundo componente, y faltan cinco días para completar poco más de 2 millones de dosis para cumplir con el cargamento ya pagado.
De no completarse la totalidad de las dosis, Guatemala se libraría de comprar más dosis de Sputnik V, y podría utilizar esos fondos para hacer negociaciones directas con otras farmacéuticas y adquirir otras vacunas contra el covid-19.