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Diario de Los Altos

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NFL Draft 2024: mejores prospectos segundo día

Después de los primeros 32 turnos, todavía hay talento de primera línea para el arranque del segundo día de selecciones.

Se fue la primera ronda del Draft 2024 de la NFL, y los quarterbacks tomaron por asalto la parte más alta del orden de selecciones.

Eso trae como consecuencia natural, que talento de primera ronda se ve empujado hacia abajo a puestos posteriores, y el talento todavía disponible es de llamar la atención.

Presentamos, en orden alfabético, a los 15 mejores prospectos todavía disponibles en el Draft 2024 de la NFL:

Trey Benson, corredor, Florida State

La de corredor será una de las posiciones más notables en el segundo día de selecciones, con múltiples elementos talentosos esperando escuchar sus nombres desde el escenario en Detroit. Benson es uno de ellos, un corredor más o menos grande –6 pies y cerca de 220 libras– con la capacidad de arrollar a los rivales, pero también con velocidad en campo abierto para pegar el cuadrangular desde cualquier parte del campo. No es tan elusivo lateralmente hablando, pero no es común su velocidad en campo abierto con esa carrocería.

Jonathon Brooks, corredor, Texas

Probablemente, Brooks sea el mejor corredor disponible en todo este año, pero una rotura de ligamento anterior cruzado en noviembre pasado le ha devaluado sus bonos de draft. Típicamente, por el tiempo que tardan normalmente los jugadores de fútbol americano de este tipo de problemas físicos, Brooks se perdería la mayor parte del trabajo de temporada, incluyendo la posibilidad de no estar listo para el arranque del campamento de entrenamiento. Pero, si un equipo tiene confianza en él, podría verse muy bien recompensado en el futuro mediato.

Keon Coleman, receptor abierto, Florida State

La palabra que mejor describe a Coleman, es simplemente ‘explosivo’. Coleman tiene un tiempo de 4.61 segundos en las 40 yardas, pero al verlo jugar existe la impresión de que es más rápido que eso. Tiene un control corporal de primera línea y tamaño suficiente para ganar balones en disputa. «Dios estaba presumiendo cuando lo hizo a él, eso fue extremadamente atlético», dijo de él Dino Babers, ex entrenador en jefe de Syracuse, después de que Coleman lograra una de las atrapadas más espectaculares de la temporada pasada, a una mano y con un defensivo encima, frente al Orange.

Edgerrin Cooper, linebacker, Texas A&M

Junto a la de corredor, no hay posición más devaluada en la primera ronda del draft, que la de linebacker interno tradicional. Cada vez hay más equipos que alinean con solo dos linebackers como su defensiva base, prefiriendo la adición de un safety o esquinero extra contra las formaciones de receptores múltiples. En este draft, Cooper está encima de cualquier otro prospecto en la posición. Es altamente activo, corre de lateral a lateral, y no representa un enorme riesgo en cobertura de pase ante alas cerradas. Por si fuera poco, le gusta el contacto violento. Cooper tiene pinta de titular desde el primer día.

Blake Corum, corredor, Michigan

Si el esquema exige un corredor que vaya ganando vapor con cada acarreo, y a su vez desgaste de poco en poco a la línea defensiva del rival, aún a costa de no sumar muchas jugadas explosivas, entonces Corum debe ser el elegido. El jugador ofensivo más importante para la consecución del título de los Wolverines llegará a una NFL donde su tamaño y peso (5 pies con 8 pulgadas, 205 libras) lo harán verse más pequeño sobre el campo de lo que se veía en Ann Arbor, pero los Wolverines le pusieron mucho peso sobre sus hombros y siempre supo responder.

Cooper DeJean, esquinero, Iowa

Como en el caso de Brooks, una lesión es culpable de la devaluación del prospecto. DeJean sufrió una fractura en la parte baja de la pierna hacia el final de la temporada, y eso genera preocupaciones entre los equipos de la NFL. Pero, DeJean aporta velocidad y cambio de dirección en cobertura, y es un peligro latente en devoluciones cuando se le permite aportar en equipos especiales.

Braden Fiske, tackle defensivo, Florida State

Transferido desde Western Michigan hasta FSU, Fiske fue por prolongados momentos el liniero defensivo más dominante de los Seminoles, y eso que jugaba al lado de Jared Verse. Tiene un motor que no para, y posee la capacidad de presionar desde el interior de la línea de golpeo. Pongan la cinta de la temporada pasada ante Florida para ver de lo que es capaz.

Kris Jenkins, tackle defensivo, Michigan

El número de tackles defensivos talentos que estarán disponibles al inicio del segundo día es notorio, y Jenkins forma parte de ese grupo. Hijo del ex liniero defensivo de los Carolina Panthers del mismo nombre, y sobrino del también liniero defensivo de NFL, Cullen Jenkins, el ex jugador de los Wolverines es menos masivo que su padre, quien anclaba desde la técnica-1 en el interior. Jenkins hijo es otro tipo de tackle, uno que busca penetrar entre los huecos antes que crear una montaña inamovible frente a la carrera del rival. Su técnica está por arriba de algunos de los otros prospectos en la posición que siguen disponibles, herencia de su linaje de NFL, seguramente.

Ladd McConkey, receptor abierto, Georgia

El nombre de McConkey se barajó frecuentemente como posibilidad para alguno de los turnos finales de la primera vuelta, pero nadie lo nombró y sigue disponible, lo que es una gran noticia para los equipos que requieren de un jugador repentino capaz de crearse espacios con cortes precisos. McConkey es otro de los casos donde las lesiones en el 2023 le perjudicaron este fin de semana de selecciones colegiales.

Kool-Aid McKinstry, esquinero, Alabama

Quizás, la mayor sorpresa de la primera vuelta fue que los esquineros terminaron pagando el precio por todos los pasadores reclutados entre los primeros 12 turnos, quedando relegados a un segundo plano. Eso hizo que nombres como McKinstry o DeJean no encontraran cupo entre los primeros 32 turnos del draft. Alguien va a tomar a McKinstry en la primera mitad de la segunda ronda y quedará complacido con sus habilidades de balón. Alabama es una de las instituciones premier en la producción de talento en la posición en los últimos años.

Adonai Mitchell, receptor abierto, Texas

Seguro, Worthy fue el receptor abierto que impuso el récord absoluto de velocidad en las 40 yardas durante el Combinado de Talento de este año, pero algunos asumíamos que Mithell se iría primero, simplemente por ser mejor receptor en lo general. Transferido desde Georgia para cerrar su carrera colegial con los Longhorns, Mitchell es un dos veces campeón nacional con manos seguras pero recorrido de rutas inconsistente.

Jer’Zhan Newton, tackle defensivo, Illinois

Otro tackle defensivo especializado en crear presión desde el interior, Newton ofrece versatilidad como potencial ala defensiva en un frente 3-4, pudiendo moverse hacia el centro en situaciones obvias de pase. La técnica y rapidez son las cartas de presentación del finalista para el Nagurski Trohpy –entregado al mejor defensivo de la nación– , no el poder bruto.

Jackson Powers-Johnson, centro, Oregon

No es una posición glamorosa, pero Powers-Johnson domina con técnica y rapidez la posición en un año en el que no tiene grandes competidores entre los prospectos a centro puros. El ganador del Rimington Trophy como el mejor centro universitario en el país tiene experiencia iniciando en las dos posiciones de guardia, y hasta de tackle defensivo.

Ennis Rakestraw Jr., esquinero, Missouri

Algunos proyectaban a Rakestraw para el cierre de la ronda inicial, pero su mala fortuna de caer hasta la segunda vuelta será la buena fortuna del equipo que lo elija. Ligeramente liviano para la NFL, Rakestraw tampoco es el más veloz de los atletas, aunque juega con disposición y energía. Posee instintos notables para una posición en la que, precisamente los instintos, aceleran la curva de aprendizaje al siguiente nivel.

T’Vondre Sweat, tackle defensivo, Texas

De los tackles defensivos de primera línea disponibles este año, Sweat es el único tackle nariz genuino, capaz de anclar desde el interior de la línea a una defensiva. Con una carrocería de 6 pies con 5 pulgadas y casi 370 libras de peso, es el clásico objeto inamovible que codician los equipos cuando sufren para frenar la carrera por el interior. No será un jugador de tres intentos, y eso le perjudica sus bonos de draft, pero hay valía en su conjunto de habilidades específicas, también.

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