Pionera de la inclusión y defensora de los derechos de los ciegos en Guatemala y más allá.
Elisa Molina de #Stahl, una figura emblemática nacida en #Quetzaltenango en 1918, ha dejado un legado imborrable en Guatemala y más allá. Desde temprana edad, mostró un profundo compromiso con el servicio a los demás, influenciada por el ejemplo de su padre, José Vicente Molina, un pionero en la medicina guatemalteca. Su matrimonio con el licenciado Rodolfo Stahl Robles en 1938 marcó el inicio de una vida dedicada al bienestar de los menos favorecidos.
En 1945, fundó el Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala, convirtiéndose en su presidenta y directora ejecutiva. Esta iniciativa fue el punto de partida de una carrera dedicada a mejorar las condiciones de vida de las personas con discapacidad visual en el país. Durante los años 50, estableció la Escuela para Ciegos Santa Lucía y los Talleres Protegidos de Manualidades Industriales Santa Lucía, proporcionando educación y oportunidades laborales para aquellos con discapacidad visual.
Un hito destacado de su carrera fue la creación de la primera Cooperativa de Ahorro y Crédito de Ciegos Unidos “Santa Lucía” en 1966, brindando autonomía económica a este grupo vulnerable. Además, su compromiso con la educación inclusiva la llevó a promover la impresión del primer libro de texto en Braille sobre cooperativismo a nivel mundial.
Los logros de Elisa Molina de Stahl fueron ampliamente reconocidos a lo largo de su vida. Desde el título de «Mujer de las Américas» otorgado por la Organización Mundial de la Salud en 1962 hasta su nominación al Premio Nobel de la Paz en 1992, su impacto trascendió fronteras. Además de sus numerosos honores, ocupó cargos relevantes en organizaciones internacionales, demostrando su liderazgo y compromiso con la causa.
Hoy, el legado de Elisa Molina de Stahl perdura en Guatemala y en todo el mundo, recordándonos la importancia del servicio desinteresado y la inclusión en la construcción de una sociedad más justa y equitativa e incluso permanece en la mente de aquellos niños que recibieron un juguete en los municipios con menos recursos el día de reyes.