En Guatemala, y en el mundo entero, las mujeres son la mayoría de población; pero, son el sector minoritario en el goce y ejercicio de sus derechos en todo sentido.
En esencia, los derechos son garantías que la sociedad debe asegurar a todos sus integrantes por medio del Estado a través de las instituciones creadas para el efecto, sean individuales o colectivos.
Y en nuestro país, aprovechando la atención sobre el tema, enfocados en el Día de la Mujer, podemos visualizar una lectura terrible sobre la situación de las mujeres, desde la tierna infancia, hasta las sabias abuelas.
En 2020, a escala mundial, el Día de la Mujer está dedicado en la igualdad de derechos, y Guatemala es el peor país del mundo en ese aspecto. En materia de igualdad económica, nuestro país es el segundo; pero, en América Latina, está después de Brasil.
En materia de analfabetismo, estamos en el último lugar, en desnutrición crónica y aguda, estamos tan mal que en el continente americano no tenemos comparación y se nos enlista con los países más atrasados de África.
En violencia y muerte violenta de mujeres, registramos cifras escandalosas y vergonzantes. Y lo peor de todo, es que son las mujeres mayas las más afectadas con lo peor de lo peor en nuestro país, que está entre los peores.
Bien dijo el Maestro Baldomero Arreaga: «Para cambiar una realidad hay que conocerla primero», y ahora que la conocemos, entre todos hay que luchar para cambiarla en favor de la mayoría en cantidad, pero minoritaria en derechos: Las mujeres.
