Es interesante que desde que el Presidente Bernardo Arévalo tomó posesión de su cargo el pasado mes de enero, las organizaciones que promueven la agenda ideológica pro desviaciones sexuales, han tenido mucho mayor exposición y apertura por parte del gobierno.
OTRANS Guatemala organización que desde el 2004 aglutina a hombres que se identifican como mujeres en Guatemala, se encuentra promoviendo una agenda política para impulsar una reforma e inclusión de los colectivos LGBIQ+ en el sistema educativo de Guatemala.
Esta organización toma como pendón el implementar una Educación Integral en Sexualidad (EIS) en nuestro país, ocultando con la necesaria educación sexual adecuada en la adolescencia de nuestros jóvenes, el discurso doble de la inclusión de elegir el genero o la desviación sexual con la que se identifican, destruyendo los conceptos de familia y abriendo un abismo moral en la juventud guatemalteca.
“Desde OTRANS-RN, como parte del Consorcio por los Derechos Sexuales y Reproductivos, participamos en el conversatorio de juventudes para exigir la pronta implementación de la Educación Integral en Sexualidad (EIS) en Guatemala. Las problemáticas que enfrentamos son evidentes y urgentes. La falta de EIS afecta nuestras decisiones y limita nuestro futuro. La juventud, estamos siendo afectadas por embarazos no deseados, violencia sexual, y la desinformación. Exigimos soluciones inmediatas que respondan a nuestras necesidades. ¡Las juventudes trans existimos y queremos educación integral YA!” mencionan en una publicación del pasado 30 de agosto en sus redes.
El caballo de Troya es la iniciativa de Ley 6157, Ley de Educación Integral en Sexualidad, presentada por la hoy diputada independiente Andrea Villagrán, una de las diputadas con más influencia dentro del actual legislativo. ¿Por qué es un caballo de Troya la iniciativa? Por el hecho de que antepone un discurso que busca proteger a la mujer y entre líneas se lee el acceso para controlar las políticas del Ministerio de Educación, penalizando a aquellos docentes y directores, así como instituciones que busquen anteponer en las enseñanzas su religión.
En los considerandos que exponen la necesidad que dicha iniciativa cobre vigencia de Ley, se lee que es para prevenir los embarazos en niñas y jóvenes, más adelante se puede leer que los niños, niñas y adolescentes, así como jóvenes, deben conocer su cuerpo y reconocer su género. La iniciativa permite además incorporar parámetros para identificar la violencia en sus diferentes formas, empezando por la violencia sexual, el acoso escolar y la violencia de género.
Quieren introducir una política educativa en Guatemala que disfrazada de prevención, sea la herramienta para adoctrinar a los niños y niñas de nuestro país en los discursos y patrañas de las agendas pro comunidades minoritarias LGTBIQ+.
La misma organización OTRANS Guatemala, ha publicado en sus redes sociales, las reuniones y cabildeos que han realizado en estos meses, intensificando su actividad desde que el gobierno de Arévalo tomó posesión. Sosteniendo reuniones con diferentes ministerios y sectores para impulsar esta agenda ideológica en Guatemala.
Durante la campaña el presidente Arévalo decía no conocer lo que era la agenda de género, sin embargo, en la practica su gobierno ha demostrado que la apertura y la visibilidad de estos sectores minoritarios, marcarán el camino de la política de su agenda que debe observar por el bien de la mayoría.
La misma Constitución Política de la Republica consagra la familia, la protege desde el matrimonio, mismo que en nuestro código civil, dice que es la unión de un hombre y una mujer. Promueve la paternidad responsable y la igualdad de los cónyuges. Eso lo hace después de invocar el nombre de Dios en el considerando de nuestra máxima ley. Es necesario programas de educación, pero no deben ser caballos de Troya para destruir a nuestra sociedad y nuestra cultura. El Estado de Guatemala debe proteger a la familia.
