Los gunners de Mikel Arteta enfrentaron uno de los partidos más duros de la temporada en el Emirates ante el Newcastle. El resultado fue un cerrado empate a cero que no estuvo lejos de la polémica.
Arteta reconoce que hay aspectos que mejorar en el juego de su equipo, sin embargo, señaló el arbitraje, pues a su juicio hay dos penales clarísimos a favor del equipo londinense que no fueron marcados por el central.
La jugada que desató la ira de los de Arteta fue al minuto 95, cuando Andy Madley descontó cinco minutos en la segunda mitad y a cinco segundos del tiempo añadido un disparo de Granti Xhaka golpeó el brazo de Jaconb Murphy, reclamando un penal que el árbitro no vio.
Los jugadores gunners con ira se comían al árbitro por no marcar el penal y Arteta tuvo un fuerte encontronazo con Eddie Howe técnico del Newcastle en la banda.
A pesar de la polémica, el empate nada le favorece al Arsenal y Newcastle, primero y tercero de la Premier League, a espera de lo que haga el City de Guardiola ante el Chelsea este jueves. Pase lo que pase, el Arsenal sigue de líder una jornada más y se cree la posibilidad de ganar el título de Inglaterra.