Este lunes se celebró un acto significativo en la historia cultural de Guatemala: la entrega de la Orden Nacional del Patrimonio Cultural Miguel Orrego Corzo a 48 Cantones de Totonicapán.
El evento, presidido por el mandatario Bernardo Arévalo, la vicepresidenta Karin Herrera y la ministra de Cultura, Liwy Grazioso, es un reconocimiento trascendental a las raíces ancestrales del país.
Durante su discurso, el presidente Arévalo destacó la importancia de la historia y la cultura guatemaltecas.
El Presidente afirmó:
Guatemala es un país con una larga historia. Una historia que muchas veces ha invisibilizado a quienes han forjado y trabajado en hacer que nuestra sociedad sea plural, rica en muchos aspectos, incluyendo nuestras formas de organización.
Resaltó cómo 48 Cantones tiene sus raíces en las formas ancestrales de gobierno del pueblo quiché occidental y la relevancia histórica de su levantamiento liderado por Atanasio Tzul en 1820.
El mandatario enfatizó la relevancia de este levantamiento, que logró expulsar a las autoridades coloniales de San Miguel Totonicapán y estableció un autogobierno quiché por cinco meses. La silla simbólica, custodiada por las autoridades ancestrales, representa la permanencia y legitimidad de este movimiento.
Además, el Presidente, expresó:
Es un gobierno propio. El gobierno ancestral y legítimo de la cabecera municipal de un departamento rural, alejado de la capital, que tiene la capacidad de liderar transformaciones históricas.
Significado de la condecoración
La Orden Nacional del Patrimonio Cultural Miguel Orrego Corzo no solo reconoce la labor reciente de 48 Cantones en la resistencia a intentos de obstruir la transición democrática, sino que también destaca la integralidad del pueblo quiché en la sociedad guatemalteca.
Por ello, el gobernante subrayó:
Es un reconocimiento de que el pueblo quiché es parte integral de Guatemala, que sus formas de autoridad, gestión y organización son válidas y legítimas.
Arévalo destacó que el Estado guatemalteco tiene mucho que aprender de estas formas ancestrales de gobierno, especialmente en áreas como la gestión del agua y el cuidado de los bosques.
Durante los últimos seis meses, se ha mantenido un diálogo constante con las autoridades ancestrales de los diversos pueblos de Guatemala.
Arévalo comentó reafirmando el compromiso de su gobierno con este proceso:
El diálogo, aunque es visto e instrumentalizado por algunos como una salida fácil, una distracción o una anestesia a los problemas de fondo, es un ejercicio complejo, y lleno de retos. Pero está rindiendo frutos y rendirá muchos más.
Sobre la orden Miguel Orrego Corzo
La Orden Nacional del Patrimonio Cultural de Guatemala lleva el nombre del arqueólogo Miguel Orrego Corzo, en honor a su destacada trayectoria y contribuciones a la investigación arqueológica del país.
Según el Ministerio de Cultura y Deportes, esta orden es un reconocimiento a personas individuales o jurídicas, nacionales o extranjeras que han demostrado un esfuerzo significativo en la defensa, valorización, investigación, divulgación científica, protección y conservación del patrimonio cultural de Guatemala.
El reconocimiento se establece mediante el Acuerdo Gubernativo 268-2022, que reforma el artículo 1 del Acuerdo Gubernativo 229-99 del 25 de marzo de 1999.
Este acuerdo detalla que la orden se otorga anualmente a quienes hayan destacado por su trabajo en favor del patrimonio cultural. El Ministerio de Cultura y Deportes destaca que Miguel Orrego Corzo ha dedicado más de 50 años a la investigación arqueológica en sitios como Kaminal Juyú, Tikal, Yaxhá, Naj Tunich, Finca Boliva, y Tak’alik Ab’aj.
El acto de entrega de la orden a 48 Cantones de Totonicapán representa un homenaje a su resistencia, liderazgo, y un reconocimiento a la diversidad y riqueza cultural de Guatemala. Este evento subraya la importancia de valorar y aprender de las formas ancestrales de gobierno y gestión, integrándolas en el presente y futuro del país.