La selección de Estados Unidos continuó su impecable trayectoria hacia su quinto oro consecutivo en basquetbol masculino pasando por encima de Brasil (122-87) y jugará ante Serbia, mientras que Francia resucitó ante Canadá (82-73) y chocará contra Alemania (76-63 a Grecia).
La Bercy Arena sustituyó en 24 horas la colchoneta de la gimnasia y la magia de Simone Biles por las canastas.
Ahí, Brasil por un momento pensó quizá que tenía una oportunidad. Estaba sólo ocho puntos detrás de Estados Unidos en el segundo periodo.
Un déficit considerable pareció de pronto posible de remontar. Pero la situación no duró mucho. Una racha de 21-2 devolvió el sentido de normalidad al duelo. Y por vigésima ocasión en 20 apariciones olímpicas, los estadunidenses jugarán por una medalla. Devin Booker encabezó un esfuerzo bien repartido, al anotar 18 puntos.
Si acaso hubo un problema para el Team USA fue que LeBron James se marchó en el tercer cuarto tras recibir un codazo cerca del ojo izquierdo. Georginho de Paula lo golpeó en la disputa de un rebote.
El astro de la NBA cayó, se colocó una toalla sobre el ojo y se marchó a los vestuarios en las postrimerías del tercer periodo.
Para entonces, el encuentro estaba prácticamente definido. Esa racha de 21-2 en los últimos 3:56 minutos de la primera mitad eliminó cualquier suspenso —si es que había alguno— y Estados Unidos convirtió esa ventaja de ocho puntos en un marcador de 63-36, de cara a los últimos 20 minutos. Bruno Caboclo fue el brasileño más productivo, con 30 puntos.
Horas antes, Serbia protagonizó la mayor remontada en un torneo olímpico. Se levantaron de una desventaja de 24 puntos para imponerse en la prórroga a Australia (95-90) en un duelo épico entre Patty Mills y Nikola Jokic.
Francia, por su parte, se impuso 82-73 a Canadá y clasificaron a su segunda semifinal consecutiva en el basquetbol olímpico.
Alemania, por su parte, actual campeona del mundo, no falló y batió a Grecia (76-63) en cuartos de final del torneo olímpico de basquetbol, para meterse en la lucha directa por las medallas, dejando fuera a una de las grandes figuras de París 2024, Giannis Antetokounmpo.
El primer choque de cuartos cruzaba a una superestrella como Giannis (22 unidades) contra un conjunto sin un líder de este calibre, pero con recursos más repartidos.
Las posibilidades griegas pasaban porque sus otros jugadores se comportaran a la altura. Cumplieron y equilibraron la balanza durante 25 minutos, hasta que el alero de Orlando Magic, Franz Wagner, tomó la batuta en el tercer cuarto y llevó la diferencia a siete al comienzo del último.
De inicio Grecia había sorprendido a Alemania. Con acierto y concentración, terminó el primer cuarto con 11 puntos de ventaja en la Bercy-Arena.
La campeona del mundo no se impacientó y fue recortando la diferencia exhibiendo multitud de recursos y exprimiendo la profundidad de su banquillo hasta igualar 36-36 justo antes del descanso, hasta que Franz Wagner (18 unidades) dio un acelerón inalcanzable junto a Isaac Bonga y Dennis Schroder, para instalarse en la siguiente fase.