Antes de que inicie la segunda sesión del Sínodo de la Sinodalidad en Roma, a principios de octubre, los participantes se reunirán en un retiro para rezar juntos y pedir perdón por los pecados en una vigilia de oración penitencial dirigida por el Papa Francisco.
Además, se llevarán a cabo cuatro nuevos foros en dos fechas paralelamente a la asamblea de un mes de duración y proporcionarán una plataforma pública para la reflexión y el debate sobre los temas teológicos que se discutirán durante el sínodo.
Estos y otros cambios en la segunda parte de la 16ª Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, del 2 al 27 de octubre, fueron destacados por los organizadores del sínodo el lunes.
Vigilia penitencial
El día antes de que comience el sínodo, un servicio de oración en la Basílica de San Pedro el 1 de octubre marcará la conclusión de un retiro de dos días en el Vaticano para los miembros del sínodo. En la vigilia pública, “algunos de los pecados que causan más dolor y vergüenza serán llamados por su nombre, invocando la misericordia de Dios”, dijo el secretario del sínodo, el Cardenal Mario Grech, en una conferencia de prensa el 16 de septiembre.
Durante el servicio de oración, tres personas hablarán sobre sus experiencias de haber sido dañadas por el abuso sexual, la guerra y la indiferencia hacia los migrantes, y habrá una “confesión de varios tipos de pecados”, dijo el Cardenal Grech. “No se tratará de denunciar el pecado de los demás, sino de reconocernos como parte de aquellos que, por acción o al menos por omisión, se convierten en la causa del sufrimiento sufrido por los inocentes e indefensos”.
El evento ha sido organizado por la secretaría del sínodo en colaboración con la Diócesis de Roma, la Unión de Superiores Mayores y la Unión Internacional de Superiores Mayores.
Según un comunicado de prensa, los asistentes pedirán perdón “en nombre de todos los bautizados” por “el pecado contra la paz, el pecado contra la creación, contra las poblaciones indígenas, contra los migrantes; pecado de abuso; pecado contra la mujer, la familia, la juventud; pecado de usar la doctrina como piedras para ser arrojadas; pecado contra la pobreza; pecado contra la sinodalidad/falta de escucha, comunión y participación de todos”.
El Sínodo de la Sinodalidad tendrá su inicio oficial con una Misa de apertura en la Plaza de San Pedro, el 2 de octubre.
Participantes y metodología
El Cardenal Jean-Claude Hollerich, relator general del Sínodo de la Sinodalidad, dijo el 16 de septiembre que no ha habido “grandes cambios” en los 368 miembros con derecho a voto y los 96 participantes sin derecho a voto en la segunda sesión de la asamblea.
Hasta la fecha, sólo se han registrado 25 cambios, en su mayoría reemplazos de personas que ya no pueden asistir, explicó, incluidos varios por motivos de salud.
El número de delegados fraternos, representantes de las religiones cristianas no católicas, ha aumentado de 12 a 16 a petición del Papa Francisco. Las nuevas incorporaciones son representantes del Patriarcado de Alejandría y de toda África, el Patriarcado Ortodoxo Sirio de Antioquía, la Federación Luterana Mundial y la Conferencia Menonita Mundial.
El formato general de la reunión de casi un mes sigue siendo muy similar al del año anterior, incluyendo la oración diaria, las reflexiones teológicas y la “conversación en el Espíritu” en pequeños grupos de trabajo divididos por idioma.
Pero los organizadores señalaron el lunes que habrá menos sesiones plenarias (cuando los miembros tienen la oportunidad de dirigirse a toda la asamblea) en 2024 y, en cambio, los representantes de cada uno de los grupos de trabajo se reunirán entre ellos para compartir lo que surgió durante las conversaciones.
También habrá “más pausas para la oración y la reflexión”, según Sheila Pires, que forma parte del equipo de comunicación del sínodo.
Una de estas pausas será otro día de retiro el 21 de octubre, según el P. Giacomo Costa SJ, secretario especial del sínodo. Explicó que este retiro permitirá a los miembros prepararse espiritualmente para la presentación del borrador del documento final del sínodo, sobre el cual serán convocados para dar su opinión antes de votar sobre el contenido final del documento.
También habrá votaciones durante el sínodo para determinar qué temas se discutirán concretamente, dijo.
Foros teológico-pastorales
Los organizadores insisten en que los temas candentes discutidos durante la primera sesión no estarán en el programa de octubre, que se centrará en «cómo la Iglesia sinodal está en misión».
Este año, sin embargo, los fundamentos teológicos y pastorales de las discusiones sinodales estarán abiertos al público para que los conozca durante cuatro foros el 9 y el 16 de octubre en Roma.
Los foros versarán sobre “El Pueblo de Dios, sujeto de la misión”, “El papel y la autoridad del obispo en una Iglesia sinodal”, “La relación mutua entre la Iglesia local y la Iglesia universal” y “El ejercicio del primado en el Sínodo de los Obispos”.
En cada foro, cuatro o cinco teólogos, canonistas y obispos presentarán “las preguntas principales, centrándose en las diferentes perspectivas desde las que se pueden ver estos temas”, dijo el 16 de septiembre el P. Riccardo Battocchio, secretario especial del sínodo.
A continuación, se abrirá el turno de preguntas y respuestas de los presentes.
Según un comunicado de prensa, los foros están destinados a todos los participantes en la Asamblea (miembros, invitados especiales, delegados fraternos, expertos). Los periodistas acreditados ante la Oficina de Prensa de la Santa Sede también están invitados y los miembros del público pueden asistir según el espacio disponible. La inscripción será obligatoria para cualquier persona que quiera participar, y los detalles sobre cómo registrarse se darán a conocer en una fecha posterior.
Estos cuatro foros, dijo el P. Battocchio, “pretenden ofrecer una nueva contribución de reflexiones (…) a los que participarán en la segunda sesión… pero también a otras personas interesadas en los temas del Sínodo”.
Abordarán, continuó, temas relacionados con varias secciones del Instrumentum Laboris.
Los ponentes de los foros aún no han sido publicados.
La asamblea de octubre del Sínodo de la Sinodalidad marcará el final de la fase de discernimiento del proceso sinodal de la Iglesia, que el Papa Francisco abrió en 2021.
La tercera fase del sínodo, después de “la consulta al pueblo de Dios” y “el discernimiento de los pastores”, será la “implementación”, según los organizadores.
El Instrumentum Laboris de la parte final del Sínodo de la Sinodalidad, publicado el 9 de julio, se centró en cómo implementar algunos de los objetivos del sínodo, dejando de lado algunos de los temas más candentes de la reunión de octubre de 2023, como las mujeres diáconos, el celibato sacerdotal y la aproximación a la comunidad LGBTQ.
Estos temas más controvertidos y otros han sido delegados a la competencia de 15 grupos de estudio formados a partir de finales del año pasado.
En cambio, el documento guía de 2024 ofrecía propuestas concretas para instituir una pastoral de escucha y acompañamiento, una mayor participación de los laicos en la economía y las finanzas parroquiales y consejos parroquiales más poderosos.
“Sin cambios tangibles, la visión de una Iglesia sinodal no será creíble”, dijo el Instrumentum Laboris, o “documento de trabajo”.
Los 15 grupos de estudio continuarán reuniéndose hasta junio de 2025, pero proporcionarán información actualizada sobre sus progresos al comienzo de la segunda sesión en octubre.
